¿Qué es la DEGENERACIÓN MACULAR?
La visión central depende de una estructura ocular denominada mácula, la cual nos permite fijarnos en los detalles y realizar actividades diarias como leer un libro, conducir o incluso, reconocer la cara de una persona.
Este tipo de visión es la que se ve afectada cuando se produce un trastorno conocido como degeneración macular, una enfermedad que afecta más a las personas mayores y que termina provocando una pérdida de la visión.
Esta pérdida de la visión conlleva una serie de consecuencias negativas en la vida diaria de las personas que padecen esta afección, cuya edad suele ser avanzada por lo general. La degeneración macular está considerada como una de las principales causas de ceguera y baja visión, y por el momento no se conoce ninguna cura.
Existen dos tipos de degeneración macular: La seca, que es la más común de las dos; y la húmeda, menos frecuente. La degeneración macular seca se presenta cuando las células de la mácula sensibles a la luz se van deteriorando poco a poco, lo que provoca que la visión central se nuble.
El síntoma más común es observar un poco borroso y generalmente afecta a ambos ojos. Esta degeneración evoluciona lentamente a lo largo del tiempo.
La degeneración macular húmeda ocurre cuando los vasos sanguíneos detrás de la retina comienzan a crecer debajo de la mácula, tienden a ser muy frágiles por lo que gotean sangre y líquido levantando la mácula de su lugar normal. En esta forma de degeneración macular, la pérdida de la visión central se produce rápidamente.
Su desarrollo no se produce por etapas como ocurre con la forma seca, y los daños son más severos. El síntoma inicial más habitual consiste en ver las líneas rectas deformadas, como si tuvieran una silueta ondulada. La visión puede volverse borrosa o perderse por completo en un periodo de tiempo muy corto.
El principal factor de riesgo para la degeneración macular es la edad, ya que para las personas de más de 50 años la probabilidad de padecer esta enfermedad aumenta considerablemente.
Actualmente, no existe ningún tratamiento que pueda prevenir la pérdida de visión que provoca la degeneración macular seca cuando ésta alcanza la etapa más avanzada.
No obstante, sí es posible frenar o prevenir que la enfermedad avance de la fase temprana a etapas más avanzadas. Acude con tu especialista de confianza.