JUANETES (HALLUX VALGUS) Síntomas y tratamiento

Hallux Valgus o juanetes, son protuberancias que se forman en la cara interna del primer dedo de los pies, relacionado con el uso de diferentes tipos de calzado (inadecuados), cuenta también con una carga genética importante.

Las mujeres son las principales afectadas por juanetes, aunque puede afectar también a hombres. La edad es indistinta, pero es más frecuente encontrar deformidades más importantes en pacientes de mayor edad.

Los principales síntomas son molestia y dolor, que incluso puede llevar a tener hábitos sedentarios por la incapacidad de realizar actividad deportiva o incluso solo para caminar o colocarse los zapatos. Todo lo anterior hace de esta deformidad del dedo gordo muy incómoda para los pacientes que la padecen.

Clínicamente se caracteriza por un aumento de volumen en la región interna del pie, presentado lo que clásicamente se conoce como un juanete, se observa también la desviación hacia afuera de la primera falange (primer dedo). Todos estos cambios alteran la dinámica de la marcha al caminar, genera dolor por roce y sobrecarga, dificulta el uso de calzado y genera deformidades secundarias en los dedos menores; sin dejar a un lado la cuestión visual y estética del pie.

Para realizar el diagnóstico, a pesar de ser visualmente muy evidente, una radiografía es necesaria para determinar diferentes angulaciones y saber cual es el grado de deformidad. La deformidad está caracterizada por un aumento en el ángulo entre el primer y el segundo metatarsiano.

Tratamiento y cirugía de juanete

El tratamiento inicial consiste en el uso de un calzado adecuado y manejo del dolor. Clásicamente se han intentado usar separadores o dispositivos de tracción y férulas nocturnas, sin embargo, no tienen buenos resultados y está demostrado que no corrige ni enlentece la progresión de esta deformidad. Si ya produce molestias, dolor, incomodidad, la alternativa es la cirugía correctiva.

El tratamiento de un juanete depende de lo incómodo que es para el paciente y la percepción del dolor o malestar que se experimenta. Hay algunas personas que tienen pequeños juanetes que son muy incómodos, por lo que limita su capacidad para caminar y usar los zapatos con comodidad.



Por otro lado, algunos pueden tener deformidades muy importantes que son molestas, pero no limitan sus actividades de la vida cotidiana.

Hay muchos procedimientos quirúrgicos diferentes que se pueden realizar. La decisión de efectuar un tipo de cirugía u otra se basa en el grado y la magnitud de la deformidad del juanete, la presencia de desgaste en la articulación del dedo gordo y el espacio entre el primer y segundo dedo. En resumen, el tipo de cirugía es un tema técnico que decide el cirujano.

Recuperación

Si bien, la cirugía tiene fama de ser dolorosa, el equipo de manejo del dolor hoy utiliza bloqueos de nervios periférico, así como esquemas analgésicos estandarizados, en todas las cirugías de hallux valgus, con lo cual el dolor dejó de ser un problema.

De esta forma, la principal molestia postoperatoria no es el dolor, sino la posible inflamación del pie, lo cual requiere reposo con la extremidad elevada, así como el uso de calzado de recuperación con una suela rígida. En cuanto al apoyo y la deambulación, depende de cada caso en particular, pero se intenta que los pacientes inicien la marcha lo antes posible. El retorno laboral va a depender, por supuesto, del tipo de actividad que realice, siendo este muy variable.

Expectativa

También la expectativa del paciente puede ser muy variable, ya que se trata no solo de un padecimiento que limita las funciones, sino que también tiene una repercusión directamente estética sobre el pie, por lo que es importante una comunicación directa entre cirujano y paciente para establecer metas claras en cada caso de cirugía.