ESÓFAGO DE BARRETT ¿Aumenta el riesgo de cáncer de esófago?

¿Quién no ha tenido ardor o reflujo después de una comida picante o con grasa? Es algo normal que a todo el mundo le ha pasado alguna vez y de lo que no debemos preocuparnos.

Sin embargo, cuando esas molestias persisten durante varias semanas, es fundamental acudir con su especialista para descartar problemas por reflujo gastroesofágico como el esófago de Barrett, una patología que, de no tratarse a tiempo, puede provocar cáncer de esófago.

El esófago de Barrett es una complicación de la enfermedad por reflujo gastroesofágico. Una patología que, si se diagnostica a tiempo, permite a quien la padece hacer una vida completamente normal, pero que puede ocasionar muchas complicaciones si no se trata de forma temprana.

El esófago es el tubo que conecta la garganta con el estómago. En condiciones normales, un anillo muscular en la parte inferior del esófago, llamado esfínter esofágico inferior, evita que el contenido del estómago regrese hacia el esófago.

En el caso de la enfermedad por reflujo gastroesofágico, este mecanismo puede debilitarse, permitiendo que el ácido gástrico y otros contenidos suban al esófago.



Esta exposición constante a ácidos puede dañar el revestimiento del esófago, provocando un cambio en las células de esta área, conocido como esófago de Barrett. Pero ¿Qué es exactamente esta enfermedad?, se trata de una herida que se forma en el esófago a causa de ese reflujo continuo.

Los síntomas del esófago de Barrett son similares a los de la enfermedad por reflujo gastroesofágico y pueden variar en intensidad y frecuencia. Algunos de los síntomas más comunes son:

•Pirosis (ardor): Sensación de ardor en el pecho, que puede irradiarse hacia la garganta.
•Regurgitación: Flujo de contenido estomacal hacia la garganta, produciendo un sabor ácido o amargo en la boca.
•Tos crónica: Tos persistente que puede ser un signo de irritación del esófago.
•Voz ronca: El ácido estomacal puede irritar las cuerdas vocales, causando ronquera.
•Dificultad para tragar (disfagia): Sensación de dificultad o bloqueo al tragar alimentos.

Si tienes estos síntomas de reflujo y ardor de manera frecuente, ponte en manos de tu especialista. Si se trata la enfermedad, se puede convivir con ella toda la vida y, si avanza, se puede curar antes de que llegue a convertirse en cáncer.